Cuando se trata de mostrar tu mercadería online, la imagen es todo. ¡Todo todo!
La similitud entre el local físico y el online es imprescindible. Puedes conseguir esto de la siguiente manera:
¡Invierte en buenas imágenes! Si las fotografías de tus productos no se ven tentadoras, ¿por qué alguien tomaría el riesgo de comprarlos? Tal vez es hora de embellecerlas un poco.
Organiza tus ítems de manera fácil y ordenada.
Provee varias formas de ver al producto, de distintos ángulos y perspectivas.
Ofrece la oportunidad de hacer zoom-in en tus productos para que los puedan ver más de cerca.
Detalles, detalles, detalles: No hay absolutamente nada malo en demasiada información sobre tus productos. Ya que tu consumidor no estará en el local para elegir con sus propias manos los productos, cuanta más información puedas dar, más acertada será su experiencia.
Algunos de los datos que querrás describir son: de qué está hecho el producto, el tamaño, las dimensiones y las instrucciones para su lavado. Si vas a mostrar un modelo luciendo tus productos, también es importante que clarifiques cuál es el talle de la persona que se ve en la foto para una mejor referencia.
Haz que tu Navegación sea Simple
Aquí te dejamos otro secreto: si tu sitio es difícil de navegar, tus usuarios tendrán que escarbar mucho para encontrar lo que quieren comprar. Y este proceso tiene que ser todo lo opuesto a engorroso. Aquí es cómo puedes hacer para lograr que experiencia de compra sea una fácil y amena:
Organiza tus menús de manera inteligente y metódica, como por tipo de producto, marca, color, etc. Esto ayudará a tus usuarios a encontrar (¡y comprar!) tus productos mejor.
Incluye el logo de tu marca en la parte superior de la plantilla, y enlázalo de nuevo a tu página de inicio.
Incluye una barra de búsqueda en tu sitio para una navegación más sencilla y rápida.
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